Mi dama

Hoy mande un beso al viento y viajo con las hojas formando un remolino a lo largo de la calle, los árboles me miraban de reojo, sonriendo y dejando pasar la luz del sol para mi, pero las nubes me miraban con tristeza a punto de llorar porque sabían que había adelante de mi, así amo mi naturaleza, así espero mi destino, besando a la dama en el aire y llorando por cada palabra, que no se ha dicho y tal vez nunca se dirá.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Multivac dice: Crestomatia

Oportunidad

Ya no hay más