M 1.0

Existí gracias a una sonrisa, fui creciendo poco a poco dentro de tu cabeza, solo tu mirada ya me daba vida, tu piel con delicadeza formaba la mía, juntas crecimos con un solo corazón, yo mirando el milagro y tu poniendo la pasión, hubo momentos de abandono, hubo momentos de desesperación, pero desde un rincón siempre sentí tu amor, llego el día después de muchas horas, podía abrazarte, tu podías sentirme toda, nos miramos a los ojos, con ese brillo estelar, pronunciaste mi nombre y nunca te deje de ver, soy una parte de tu vida, pues tu me acabaste de tejer.